Cada persona es un mundo y cada relación también. De las muchas formas que existen para seducir, hay algunas mujeres que se lanzan a cazar el talento de un hombre, a la altura de los que ella tiene.
Hoy esas mujeres desean un hombre en su vida, que aporte a todo su conjunto personal. En general hoy son independientes y autónomas. Y lo que sigue existiendo en ella, como cualidad femenina, es la necesidad de seducir al hombre de su vida.
Y durante el proceso, ella va elaborando su análisis y obteniendo conclusiones de las pruebas que le va poniendo. Sí, la mujer comprobará si eres el hombre que enseguida se cansa, si eres luchador nato, si eres fuerte. Ella necesita un héroe en su vida.
Y con esos resultados a ella le irás demostrando si serás suficientemente valiente para los cambios de la vida, si en un momento de problemas que lo necesite puedas estar para ella.
La mujer de valía, competente y profesional busca un hombre, no un niño, un hombre que descubra quién es ella y a su vez que la valore, la atienda, la preste atención y la dé su lugar.
Prefiere un hombre que se atreva, a la vez discreto y muy seguro, capaz de decir "no" cuando él considere necesario. Marcando la diferencia entre un hombre con personalidad, y alguien necesitado, o mejor "desesperado".
Una mujer que tiene seguridad, busca a la vez un hombre comprensivo que la entienda, con flexibilidad y tolerancia, según los diferentes momentos de la vida que tendrán que afrontar.
Y el héroe que esté dispuesto para ese recorrido, es probable que sepa también que esa mujer tiene muchas y especiales capacidades para compartirlas con él. Por ello el hombre héroe, si cree que merece la pena la continuidad en la meta de la conquista, por ella no se rinde. Ella le merece ese esfuerzo.
Y ella, descubre así a su propio héroe, que la convierte a ella en heroína también.